[Review] SNK vs. Capcom: SVC Chaos

Si SNK y Capcom se juntan para un crossover, uno puede esperar algo realmente genial, pero había una época donde estos crossover se quedaban a mitad de camino de lo que deberían haber sido en realidad, y justamente el SNK vs. Capcom: SVC Chaos fue un ejemplo de esto.

SNK decidió relanzar el SNK vs. Capcom: SVC Chaos para todas las plataformas menos Xbox, pese a que el original salió en Xbox únicamente fuera de Japón. Me pareció en principio una decisión algo llamativa, ya que el juego que realmente rompió el molde de los crossover y fue un juego que hizo que pierda muchísimas noches de sueño fue el SNK vs. Capcom 2.

Pero no nos detengamos en lo que podría haber sido, y veamos que trae este SNK vs. Capcom: SVC Chaos.

Visualmente, SVC Chaos se mantiene fiel al clásico. Demasiado fiel les diría, ya que no hay absolutamente ninguna mejora fuera del menú. Si les gustan los juegos retro les van a gustar los gráficos, los personajes se ven bien y los escenarios tienen ese toque nostálgico que recuerda a los días de gloria de los arcades.

Yo lo jugué en PC y tiene varios modos de resolución, como todo juego de PC, y jugarlo en una resolución alta hace que el juego se vea decente en pantallas modernas, pero no hay mejoras reales en lo que es el el apartado gráfico, por lo que no va a exigir ninguna PC ni consola alguna.

En cuanto a jugabilidad, estamos claramente en el territorio de los juegos de lucha de principios de los 2000, o sea es un juego que ya tiene casi 20 años encima. Los combates son rápidos y, aunque los controles responden bien, hay una sensación de que le falta algo.

La IA enemiga puede ser una montaña rusa. A veces es un paseo fácil, y otras, parece un muro de ladrillos con ataques más injustos que desafiantes, al punto que le podemos tirar hadouken tras hadouken y nos van a esquivar todos, sintiendose muy desafiante y a veces un poco injusto.

Los jefes, en particular, tienen esa tendencia a usar tácticas que se sienten más frustrantes que divertidas. Hay personajes divertidos como Zero, de la saga Megaman/Rockman, pero igualmente la dificultad hace que no sea tan divertido, y eso que en general los juegos de pelea son unos de mis géneros favoritos.

El roster de luchadores es uno de los puntos fuertes del juego. Poder elegir entre más de 30 personajes icónicos es genial y trae de vuelta esos momentos clásicos. Sin embargo, el juego no ofrece muchas mecánicas nuevas o emocionantes, y el sistema de combate se siente algo simplificado en comparación con otros títulos de la época.

El juego incluye modos básicos como Arcade y Práctica para jugar single player si queremos, como cualquier juego de pelea. Pensemos que solo trae modos de un jugador, dos jugadores o un modo online que lo sentí bastante anticuado.

Tenemos un menú para ingresar al lobby a poder pelear contra la poquísima gente que me encontré online en la versión de Steam,  y también podremos nosotros crear un lobby para que la poquísima gente que hay jugando, nos reten a una pelea. Y ya está, esos son los modos online que tiene el juego. ¿Ya dije que hay poquísima gente?. Bueno, no hay muchos jugadores jugando online, por lo que no esperen sacar mucho jugo de este modo.

Un aspecto positivo del online es que tiene un netcode de rollback que asegura partidas sin mucho lag.

El contenido adicional, como la galería de arte y la opción de ver las hitboxes, puede ser interesante para algunos, pero no es suficiente para darle un gran valor al juego realmente.

SNK vs. Capcom: SVC Chaos es un claro ejemplo de que la nostalgia puede ser un arma de doble filo. Si bien hay momentos divertidos y una oportunidad para revivir viejos tiempos, los problemas de balance, la IA desigual y la falta de innovaciones modernas son evidentes. Comparado con otros juegos de lucha de su época o los crossovers de Capcom y SNK, este título se siente un poco rezagado, y sigo pensando que es lo que esperaba SNK al lanzar este juego y no el SNK vs. Capcom 2 que ese sí es un gran exponente de lo que un crossover nos puede dar.