The Last of Us Remastered llegará en unas semanas a PlayStation 4 suponiendo la remasterización en la nueva consola de uno de los mejores títulos del pasado año, con gráficos renovados y los contenidos descargables incluidos. Aparentemente, según ha dicho Naughty Dog, el trabajo para portar el título de PS3 a la nueva consola de Sony no está siendo tan fácil como se puede suponer debido a las diferencias de hardware entre las dos consolas.
En declaraciones a la revista británica Edge, Neil Druckmann de Naughty Dog ha dicho que desearían que solo hubiese que pulsar un “modo PS4”, pero que ya sabían que el proceso de conversión “iba a ser un infierno, tal y como ha resultado ser”.
El motivo es que el título original, uno de los juegos con mejor acabado gráfico de la pasada generación, estaba optimizado para funcionar con la intrincada arquitectura de PlayStation 3, aprovechando sus unidades SPU, hasta el punto de tener código escrito en binario. Al tener que traspasar el juego a la arquitectura de PS4, similar a la del PC, tuvieron que cambiar muchas cosas del código y asegurarse varias veces de que los sistemas funcionasen correctamente, para luego volver a optimizarlo.
Druckmann también ha dicho que las escenas cinemáticas del título van ahora a 1080p de resolución y 60 fotogramas por segundo, y que han sido renderizadas de nuevo desde cero, con un aumento de calidad que dice ser difícil de apreciar en Internet por la compresión de los vídeos de Youtube y otros servicios.
El director creativo del estudio también ha dicho que ahora mismo están trabajando en dos experiencias “completamente nuevas”, aunque no desveló si una de ellas es el ya confirmado nuevo Uncharted para PS4.