Con algunas modificaciones el conversor también funciona con otros motores basados en DirectX, por lo que su utilidad podría extenderse más allá de los videojuegos. En el caso de Valve, el lanzamiento abierto de ToGL representa sin duda un aliciente para que los desarrolladores lleven sus títulos al sistema operativo de la plataforma Steam.
De forma general, ToGL intercepta las llamadas de los programas a Direct3D reemplazándolas con su equivalente en OpenGL. Esta tarea de emulación funciona a costa de sacrificar algo de rendimiento, sin embargo los ports de Dota 2 y Left 4 Dead 2 para OS X son testigos del ligero impacto que tiene el código de conversión.
Por ahora ToGL tan solo soporta una parte muy limitada de Direct3D 9.0c y todavía sin algunas funciones, pero los responsables de Steam animan a los desarrolladores a modificar y distribuir el código a su gusto bajo licencia BSD. Con el tiempo esto podría desembocar en un conversor compatible con Direct3D 11, que con la próxima retirada de Windows XP será la librería soportada por todos los sistemas de Microsoft.
Mientras Valve dispone la alfombra roja para que los estudios se decidan a dar el paso a Linux, uno de los grandes sentará precedente en la próxima GDC 2014. Crytek, responsable de títulos como Ryse: Son of Rome y Crysis 3, ha anunciado que mostrará en la feria su motor gráfico CryEngine con soporte total para Linux.