[Review] Razer Huntsman Mini

Cuando parecía que los teclados de alto rendimiento ya habían alcanzado su punto máximo en 2020, Razer sorprendió con un modelo compacto pero potente: el Razer Huntsman Mini. Este teclado en formato reducido al 60% mantiene todas las características que hicieron destacar a sus predecesores, incluyendo un chasis de aluminio, interruptores optomecánicos y teclas de PBT. Pero, ¿vale la pena optar por un teclado tan compacto?.

El Razer Huntsman Mini está disponible en dos colores: Classic Black y Mercury White. Con unas dimensiones de 293,3 x 103,3 x 36,8 mm y un peso de apenas 458 gramos, este teclado combina portabilidad con una construcción robusta. Su cubierta superior de aluminio tiene un acabado mate, lo que le otorga un aspecto premium sin perder su esencia minimalista. La ausencia de teclas de función y del teclado numérico puede ser una ventaja para quienes buscan optimizar su espacio de trabajo o si lo requieren para ir de transporte, pero ante el uso regular de un trabajo es muy difícil acostumbrarse.

La base cuenta con cuatro soportes de goma antideslizante y dos soportes de elevación ajustables con diferentes posiciones (6 y 9 grados). Esto permite adaptar la inclinación del teclado para una mayor comodidad durante el uso prolongado. Además, el cable USB-C es extraíble, lo que facilita su transporte y almacenamiento sin el riesgo de dañar el conector. Algo simpático es que el conector USB-C que posee en el teclado tiene una especie de guías laterales para que nunca fallemos al momento de enchufarlo.

Uno de los puntos más atractivos del Huntsman Mini es su tecnología de interruptores optomecánicos. A diferencia de los interruptores mecánicos tradicionales, estos utilizan un sistema basado en láser para registrar las pulsaciones. Esto se traduce en una respuesta más rápida y precisa, ideal para gaming.

Razer ofrece dos tipos de interruptores en este modelo:

• Interruptor Morado: Respuesta táctil con una distancia de actuación de 1,5 mm y una fuerza de activación de 45 g, similar a los Cherry MX Blue. Su sonido es bastante característico.
  
  
• Interruptor Rojo: Respuesta lineal con una distancia de actuación de solo 1 mm y una fuerza de activación de 40 g, comparable a los Cherry MX Speed. Estos interruptores son mucho más silenciosos y están optimizados para velocidad.

Gracias a esta tecnología, el desgaste de los interruptores es menor en comparación con los tradicionales, ya que no dependen de contactos metálicos para funcionar.

El formato compacto del Huntsman Mini lo convierte en una opción atractiva para quienes buscan maximizar el espacio de su escritorio sin sacrificar el rendimiento. Su tasa de sondeo de 1000 Hz garantiza una respuesta inmediata, lo que es clave para los juegos competitivos.

Para quienes estén acostumbrados a teclados de tamaño completo, puede llevar un tiempo adaptarse a la ausencia de teclas de función y flechas dedicadas, como mencioné anteriormente. Sin embargo, Razer ha solucionado esto mediante atajos integrados en las teclas existentes, lo que permite acceder a todas las funciones necesarias sin inconvenientes.

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Las teclas están fabricadas en PBT de doble inyección, un material mucho más duradero que el ABS tradicional. Esto garantiza una mayor resistencia al desgaste y una sensación táctil más sólida. Sin embargo, un detalle a tener en cuenta es que los caracteres pueden ser difíciles de ver si la retroiluminación está apagada.

El cable trenzado que posee es otro punto a favor, ya que ofrece una mayor durabilidad y conectores reforzados para evitar daños con el uso prolongado. Este tipo de cable definitivamente cambia vidas.

El Huntsman Mini cuenta con retroiluminación RGB personalizable mediante el software Razer Synapse. La intensidad de la iluminación es uniforme gracias a los caracteres grabados con doble inyección, asegurando una excelente visibilidad en ambientes oscuros.

Un detalle curioso es la ausencia de un LED de notificación para la tecla de mayúsculas. En su lugar, la propia tecla cambia de color cuando está activada, una solución minimalista pero efectiva.

A través de Synapse también se pueden asignar macros y gestionar perfiles de configuración, permitiendo sincronizar los efectos de iluminación con otros dispositivos Razer mediante Chroma Studio.

El Razer Huntsman Mini está pensado para jugadores y usuarios que buscan un teclado compacto sin renunciar a la calidad. Su portabilidad y tecnología de interruptores lo hacen una excelente opción para quienes necesitan una respuesta rápida y precisa en sus pulsaciones. Sin embargo, su tamaño reducido puede no ser ideal para quienes dependan de teclas de función o un teclado numérico en su trabajo diario. En ese caso, quizás un modelo tenkeyless (TKL) sea una mejor opción.