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| Plataforma: PS5 |
| Género: Acción | RPG |
| Desarrollador: Square Enix |
| Editor: Square Enix |
| Fecha de lanzamiento: 18 de Abril de 2024 |
| Precio: U$S 19,99 PlayStation |
| Idioma: Voces en Inglés | Subtítulos en Inglés y Español |
La franquicia Final Fantasy está en uno de sus mejores momentos, sin lugar a dudas. La reconocida IP de Square Enix, luego de lanzar Final Fantasy VII Rebirth, uno de los candidatos (por lo menos para quien escribe estas líneas) a Juego del Año 2024, ahora es el turno de volver a prestarle atención a la última entrega numerada, Final Fantasy XVI y su último DLC, The Rising Tide.
Antes de meternos de lleno en la reseña, les contamos que The Rising Tide es el segundo y último contenido descargable anunciado para el título protagonizado por Clive Rosfield, y que junto con Echoes of the Fallen forma parte del pase de expansión que puede ser obtenido por 25 dólares. Por eso, si van a adquirir The Rising Tide (20 dólares si se compra sólo), mi recomendación es que vayan por el Pase de Expansión. Ahora si, vamos a la reseña.
The Rising Tide es un contenido extra para Final Fantasy XVI, y como tal, no forma parte esencial para la historia. Esto no quita que sea un gran complemento y conteste una de las preguntas que nos hacíamos los que jugamos el juego: ¿Qué pasó con el Eikon Leviathán y su Dominante?. La historia base menciona su existencia y su enigmático destino, pero nada más. Lógicamente Square Enix tenía todo planeado, porque en The Rising Tide el eje central es este poderoso Eikon.
Pequeña aclaración, este análisis va a contener algunos spoilers de la historia principaldel juego, por lo que continúen bajo su propio riesgo. Para poder disfrutar de este DLC, deberemos estar bastante avanzados en la historia base, casi en sus últimos compases. Para acceder a la misión, debes desbloquear Origen en el mapa del mundo y completar la misión “Mi tesoro”.
Para ver cómo desbloquear la misión “Mi tesoro”, deberemos llegar a la misión principal “De vuelta al origen” y tener completadas 3 misiones secundarias: “Mucha tela que cortar”, “El Fénix inmortal” y “En el nombre de su padre”. Una vez cumplidos estos requisitos y, luego de hablar con Jill, recibiremos una misteriosa carta que desbloqueará la misión “Mi Tesoro” y, por ende, The Rising Tide.
Al inicio de este contenido descargable, conoceremos a Shula, la líder de la tribu del agua, quienes se ocultan en Mysidia desde hace poco menos de 100 años explicando las razones de dicho ocultamiento y por qué su nula interacción con el mundo exterior. Además, conoceremos qué pasó con Leviathán el Perdido, uno de los Eikons más poderosos, y su Dominante. No vamos a entrar en detalles sobre este punto para que cada uno disfrute de la experiencia, pero podemos decirles que la historia es muy interesante. Además, como pasó con la historia principal, toca temas complicados donde es imposible que uno no termine sintiendo empatía por los personajes y su destino.
Shula es un personaje muy interesante, y sus explicaciones tienen sentido de por qué su pueblo se mantuvo escondido tanto tiempo. Lamentablemente, el foco que se le da a este nuevo personaje secundario deja mucho de lado a Joshua y Jill, los otros protagonistas de Final Fantasy XVI, pero podemos dejarlo pasar por el simple hecho que ya tuvieron muchas horas para brillar. Se entiende su inclusión en la historia, pero realmente no es algo que haya sido realmente necesario. El mismo Clive también tiene un papel cuasi secundario, dando lugar a Shula para brillar. Tiene sentido.
Como todos los que jugaron Final Fantasy XVI saben, Clive tiene el “poder” de tomar la esencia de los Eikons y hacer suyo sus poderes. Esto no es distinto con Leviathán, cuyas habilidades obtendremos casi al inicio del DLC. Estas nuevas habilidades nos permitirán controlar a grandes masas de enemigos y efectuar ataques a distancia, pero no por ello dejan de ser igualmente de letales que los poderes de los otros Eikons. Si se preguntan por la batalla contra este Eikon, sí, combatimos contra el y es una de las secuencias de pelea más imponentes del juego. Creo que está al nivel de la batalla contra Bahamut, con 3 secuencias de batalla bien definidas y que nos presenta un desafío más que interesante.
Pero el punto alto de The Rising Tide es Mysidia y su gente. Dejamos de lado los castillos, paisajes rocosos y llenos de oscuridad (en parte por la Plaga y en parte por las acciones de Ultima) para pasar a un entorno rodeado de vida, junglas llenas de verde y una paleta de colores que nos da un respiro de tanto gris. Eso no es todo, hay nuevos enemigos, batallas desafiantes y hacen su aparición en esta entrega los temibles Tonberrys. Realmente, el equipo de desarrollo le dió mucho amor a este DLC y se nota.
Esto no es todo. Los habitantes de Mysidia, la tribu detenida en el tiempo, también dan que hablar con su pelo plateado y sus ojos azules penetrantes. Todos ellos tienen una historia para contar y viven en una armonía realmente envidiable, con todos haciendo su parte y dejando de lado el beneficio personal por el bien común.
Una vez finalizada la historia, habilitaremos el Kairos Gate, el cual estará disponible para ingresar en la Piedra de Arete, y donde deberemos salir victoriosos en 20 combates predeterminados para obtener mejoras en nuestras habilidades como recursos para crear el arma más poderosa del juego. Clive cuenta con estadísticas y un equipo ya predeterminado, pero podremos seleccionar la combinación de Eikons que mejor nos sirva para cada batalla
Cada cuarto está compuesto de tres oleadas de enemigos para terminar en un mini-jefe o jefe que ya combatimos en la historia principal. Con cada victoria, obtendremos puntos especiales que servirán para incrementar alguna habilidad de Clive, así como obtener una mejora momentánea, dándole una pizca de contenido roguelite al juego. Esto no es todo. Para los que les gustan los desafíos, si en las 20 batallas obtenemos una clasificación S, podremos combatir contra un jefe oculto.
Como conclusión, The Rising Tide no desentona con lo que nos ofrece la historia de Final Fantasy XVI, al contrario, se siente como un complemento perfecto y para nada forzado. Tranquilamente podría haber sido parte de la historia principal. Aumenta el lore de esta entrega y nos hace entender las razones de Shula y su tribu para continuar en el anonimato. La batalla contra Leviathán es impresionante, y su nivel de detalle es para sacarse el sombrero. Mysidia es un lugar hermoso para recorrer, y las habilidades de este nuevo Eikon ayudarán a crear una nueva combinación de ataques para Clive que resultará realmente devastadora.
