“No es nada divertido cuando PSN se cae”, dijoSpencer. “No ayuda. Todo lo que hace es crear miedo y desconfianza en cualquier jugador que utilice estos servicios. Tenemos una oportunidad para compartir con el resto de compañías lo que podamos acerca de lo que estamos aprendiendo y cómo solucionar estos problemas. Esas conversaciones se dan, y creo que es genial “.
Tanto Xbox Live como PSN fueron atacadas durante la pasada Navidad, un evento que el propio Spencer considera una “experiencia de aprendizaje”, según el artículo de Game Informer. También dijo que agradece la paciencia de los usuarios de Xbox Live durante los ataques. “Nuestro compromiso con los clientes de Xbox One es asegurarnos de que nuestro servicio es robusto y fiable”, dijo.
Siempre es bueno ver a las grandes empresas trabajar juntas para resolver problemas comunes que afectan a los usuarios, a pesar de la alta competitividad que existe entre ellas.