Junto con el lanzamiento de un nuevo parche para Fortnite, más precisamente el 8.10, ahora nos encontramos con uno de los cambios más sustanciales en cuanto a su jugabilidad: los usuarios de Nintendo Switch serán emparejados automáticamente con los de dispositivos móviles.
Aunque para algunos esta puede ser una movida polémica por parte de Epic Games, lo cierto es que el rendimiento de Fortnite Battle Royale en la consola híbrida de Nintendo no es igual al que podemos encontrarnos en PlayStation 4 y Xbox One, es por ello que se generaba cierta desventaja para los primeros usuarios en comparación con el resto.
Esto llevará a que las partidas sean más justas y mejorará la experiencia de juego, ya que los usuarios de PlayStation 4 y Xbox One continuarán jugando juntos. Igualmente, los jugadores de Switch podrán participar en partidas con usuarios de esas consolas, aunque deberán invitar de forma manual a sus amigos a la partida.