“Me resulta raro que la gente juegue a algún juego retro pixelado y aun así la resolución importe de alguna manera”, comenta Hutchinson señalando el fin de la obsesión por la fidelidad gráfica. “Piensa en cómo solían ser las cosas. Solía haber gráficos en la parte de atrás de la caja que vendían un juego. Y desde la Xbox 360 y la PS3, […] creo que el 99% del tiempo eso se ha extinguido”.
“Es poco habitual que ahora preguntes por la resolución o algo así. Solo se saca la cuestión a causa de la disparidad, la idea de que una versión se esté limitando. No creo que eso haya vendido consolas desde hace ya bastante”.
“Creo que las experiencias son las que venden consolas, y eso es tu desafío, si no tienes una gran experiencia nueva, o una experiencia social. […] Como Call of Duty a los juegos de Crytek, uno vende una puñetera tonelada y lo otro no”.
Además de tachar las discusiones sobre gráficos como obsoletas, Hutchinson asegura que las voces que continúan debatiendo son una minoría no representativa de la industria. “El 5% de la gente online lo comenta, y el 95% solo se lo traga o no se lo traga. Creamos estas cámaras de eco extrañas para esos asuntos, y a veces me cuestiono, no creo que esto sea real”.