Microsoft ha anunciado el lanzamiento del Xbox One Elite Wireless Controller, un nuevo mando para su consola que se suma a la reciente renovación del mando anterior -que ahora incluirá una toma de auriculares- y que va mucho más allá al ofrecer un diseño modular en el que es posible intercambiar partes de su diseño, como sus joypads digitales o analógicos y unos nuevos gatillos situados en la parte inferior.
Esa modularidad es sin duda la seña de identidad de un mando de control diseñado y orientado a jugadores que quieren dar un pasito más en esa experiencia de videojuegos. En Microsoft demostraron en un breve vídeo la capacidad de los nuevos mandos en ámbitos como los juegos de carreras, los FPS o los de lucha en los que se han incorporado novedades interesantes.
Personalizables al máximo
Por ejemplo los gatillos de la parte inferior que permiten controlar la aceleración y el frenado de los juegos de conducción con mayor precisión, los interruptores de bloqueo para controlar por ejemplo mejor las armas y las ráfagas en los First-Person-Shooter, o la mayor precisión de los joypads digitales que parecen darlo todo en los juegos de lucha.
Pero sin duda es esa capacidad de intercambiar los joypads analógicos y el digital o los gatillos los que permitirán afinar la experiencia de juego a esos jugones intensivo que tendrán a su alcance distintos tipos de accesorios para hacer que estos mandos se adapten mejor a sus necesidades.
Los niveles de personalización van más allá y permiten reprogramar tanto los cuatro botones tradicionales de la parte frontal como los gatillos de la parte inferior, pero también seremos capaces de establecer las curvas de sensibilidad de los joypads analógicos. Los mandos están diseñados para la Xbox One, pero también para poder disfrutar de los futuros títulos que aprovechen toda la potencia de Windows 10 en PCs y portátiles. Estos mandos llegarán al mercado este otoño, pero no conocemos de momento su precio.
Fuente: xataka
