Hace unos días Dissidia Final Fantasy NT llegó a mis manos y en estas líneas te voy a contar, desde mi perfil de fanático de la saga, lo que nos trajo este nuevo juego de héroe contra héroe.
Lo más hermoso sin dudas y más esperado de Dissidia es el steelbook que fué dividido en 3 formatos diferentes, todos de gran calidad, con algunas sorpresas, y aunque no podés elegirlo, te tocará el que tenga que tocarte y será de gran calidad. Nosotros ya hicimos el unboxing, miralo acá.
Más allá del hermoso steel, el juego es el primero con esta temática de PS4 y a pesar de que tiene puntos muy bajos, hay otros que realmente sorprenden, especialmente si sos fanático de la saga, sino seguí de largo porque es casi imposible que te guste.
Empecemos con el sistema de batalla: uno de los puntos más bajos del juego radica en un sistema de lucha paupérrimo, con muchisimas falencias, pero a la vez logra captar la atención por sus referencias a los juegos del cual sale cada personaje. Con esto quiero decir, cada uno de los luchadores (Cloud, Tidus, Terra, Noctis, etc.) tiene armas y trajes acordes a sus juegos, y que podrán desbloquear de dos formas, comprándolos con guiles o con los tesoros que nos irá dando el juego cuando ganemos batallas. Y las referencias no terminan ahí, ya que los “limites” también están dentro de las batallas y podemos desbloquearlos a medida que avancemos, lo mismo que las mágias que podremos combinarlas como queramos.
Sin embargo las cámaras hacen que el juego nos haga sentir ganas de no jugarlo. El sistema de “auto-target” nos complica la vida constantemente, no podemos movernos libremente del todo de forma automática, casi siempre estaremos apuntando al rival o a algún cristal. Esto en un juego de lucha es un mecanismo que claramente no funciona y no alienta a que juegues lo suficiente para platinarlo (más de 300 batallas online, ¡UNA LOCURA!).
Gráficos
El juego cuenta con los gráficos de la última época de los FF. Los escenarios basados en cada título están muy bien y nos dan una nueva perspectiva de cada lugar. Los ataques son fieles, las magias también y las invocaciones (cuando las podés ver con las cámaras horrendas), están perfectas.
Jugabilidad
El punto más flojo de todos. Las peleas son difíciles, hay personajes rotísimos (Lightning y Noctis) que hacen tu vida imposible en el online. En el modo historia pasas de luchar contra 3 personajes casi indefensos a enfrentarte a Lamú y otros eidolons casi indestructibles. La cámara es confusa, cuesta agarrarle la mano y no vale la pena porque estás volando de un lado a otro casi todo el tiempo. Los ataques VIT y EX son complicados de entender y una vez que lo hacés las posibilidades se acortan muchísimo. Claramente para ser un juego de lucha deja mucha tela por cortar.
Ambientación
Otro de los grandes puntos. Dissidia refleja cada escenario de la saga, desde FFI a FFXV, todos detallados e interactivos. No hay mucho más que eso, sin embargo valen la pena.
¿Qué tenemos dentro del juego?
Grandes cantidades de posibilidades de personalización, íconos, themes musicales, armas y trajes. Personajes y villanos de primer nivel como nos tiene acostumbrados la saga de Square Enix.
Lo mejor
El universo FF en si, los escenarios, músicas y personajes entrañables que nos hicieron meternos horas y horas dentro de sus mundos. El modo batalla por cristales es sin dudas el más entretenido.
Lo peor
Todo lo demás. El sistema de juego, las cámaras, la historia, la demora constante en el online y por sobretodo el sistema de batalla (bastante importante sabiendo que es un juego de peleas).
Dissidia Final Fantasy NT es un conjunto de sentimientos, es luchar constantemente contra tu lado fanático y un juego mal planteado. Sin dudas si tuviera personajes random, el juego sería uno del montón, pero las constantes referencias, los lindos gráficos, las muchas formas de combinar tus personajes con un sistema RPG particular, y el hermoso Steelbook hacen que sea un juego digno para fanáticos, pero no mucho más.