En el medio especializado en tecnología AnandTech han puesto a prueba una versión todavía preliminar de DirectX 12, que llegará junto a Windows 10, y han comprobado un incremento en el rendimiento de las tarjetas gráficas AMD de un 400% y de un 150% en modelos Nvidia.

Así, por ejemplo, en el análisis llevado a cabo han visto cómo en DirectX 11 unaGTX 980 de Nvidia rendía con 26,7 imágenes por segundo pero este número subía hasta las 66,8 imágenes por segundo con DirectX 12. En el caso de una AMD Radeon R9 290X se pasaba de 8,3 imágenes por segundo en DirectX 11 a 49,2 en DirectX 12.

Según explican, esto se debe a que la nueva API de DirectX consigue salvar el tradicional cuello de botella que representan los procesadores principales (la CPU) y, además, escala de manera eficiente los múltiples núcleos de las CPU actuales para maximizar su rendimiento. Por tanto, se consigue una carga de trabajo más equilibrada entre todos los núcleos de la CPU (hasta cuatro núcleos, al menos por ahora) lo que produce un mayor rendimiento en la GPU.

 

Fuente: Vandal