[Review] Towerborne

Towerborne es un juego que mezcla la acción de un beat ’em up clásico con el toque RPG, creando una experiencia fresca y emocionante. Actualmente en acceso anticipado para PC, este título se presenta como una propuesta atractiva en el mundo de los juegos free to play.

Desarrollado por Stoic, el estudio conocido por The Banner Saga, Towerborne destaca por su estilo visual vibrante y su sistema de combate directo, que recuerda a los juegos de acción de toda la vida pero con un giro moderno. La historia se desarrolla en un mundo donde la humanidad está casi extinta, y los pocos sobrevivientes se refugian en una enorme torre. Los jugadores toman el rol de un “As”, una figura mítica con habilidades únicas, encargada de enfrentarse a hordas de monstruos y salvar lo que queda de la civilización.

La torre sirve como el centro de operaciones del jugador, donde se pueden mejorar los personajes, conseguir equipo y prepararse para las misiones. El juego ofrece un mapa abierto dividido en hexágonos, cada uno con un nivel diferente que se puede completar en el orden que el jugador elija. Aunque los escenarios pueden parecer repetitivos, la variedad de enemigos y las misiones siempre ofrecen algo nuevo para mantener el interés.

El sistema de combate de Towerborne es uno de los puntos fuertes del juego. Aunque no reinventa la rueda, ofrece una experiencia sólida que recuerda a los clásicos beat ’em ups. Avanzamos enfrentándonos a oleadas de enemigos con una combinación de ataques ligeros, pesados y especiales, todo envuelto en unos efectos visuales bellísimos. El juego cuenta con cuatro clases jugables, cada una con su propio estilo de combate. Desde el guerrero con espada y escudo hasta el pirómano con su mazo lanzallamas.

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Aunque el combate es clave, Towerborne también se enfoca en la progresión de tipo RPG. A medida que avanzamos, vamos obteniendo loot que mejora nuestras habilidades y equipamiento. Las misiones tienen diferentes niveles de dificultad, lo que invita a repetirlas para conseguir mejores recompensas. Este ciclo de hacer una misión, ganar loot, mejorar, y seguir, mantiene el juego entretenido durante muchas horas.

Además, Towerborne ofrece un modo cooperativo para hasta cuatro jugadores, lo que lo hace aún más divertido. Si no tenés amigos para jugar, el sistema de matchmaking empareja a los jugadores según su nivel, asegurando una experiencia equilibrada para todos.

Aunque Towerborne no es una revolución en los beat ’em up, su mezcla de acción y RPG lo convierte en una opción interesante. La estética atractiva y el combate fluido, junto con la posibilidad de jugar en cooperativo, lo hacen un título a tener en cuenta.